En la conmemoración de un nuevo aniversario del fallecimiento del general José de San Martín, la Secretaría de Atención Ciudadana y Gestión Comunal de la Ciudad se unió a los homenajes del 17 de agosto con un gesto simbólico: la confección de una réplica de la bandera utilizada en el Cruce de los Andes.
El paño fue exhibido en el Salón de Banderas porteño este 16 de agosto junto a la celebración de una charla informativa titulada “El General San Martín que no conocemos”. La copia del emblema patrio fue realizada por el Taller de Banderas de la Dirección General de Competencias Comunales y Talleres, bajo la órbita de la Secretaría de Atención Ciudadana y Gestión Comunal de la Ciudad.
“Nos honra la posibilidad de poder exhibir una réplica de esta reliquia histórica en una conmemoración tan importante”, señaló Julia Domeniconi, secretaria de Atención Ciudadana y Gestión Comunal.
La copia realizada por el Taller de Banderas de la Ciudad presenta las características y el tamaño estimado atribuido a la original, unos 1,44 x 1,22 metros, y reproduce las roturas que el emblemático paño sufrió a lo largo de los años. El diseño, compuesto de dos fajas (una superior en color blanco y otra inferior en celeste), responde a los estándares de la bandera creada por Manuel Belgrano en 1812. En el centro, porta un emblema basado en el escudo patrio constituído en la Asamblea del año XIII.
El equipo de expertos en historia y vexilología del Salón de Banderas de la Ciudad repasa la historia detrás de la confección del paño original. “A fines de 1816, San Martín se traslada a Mendoza persiguiendo el famoso plan de liberación continental”, introducen. Y explican que, en ese contexto, en el marco de unas tertulias celebradas con las Damas Patricias mendocinas, surge la necesidad de crear un símbolo para el Ejército que cruzaría los Andes durante el enero siguiente.
El vexilo fue finalizado en la navidad de 1816. “Entre Remedios de Escalada, esposa del Libertador, y las otras cinco Damas Patricias, confeccionaron el distintivo con telas que pudieron conseguir y elementos básicos que tenían a su alcance, como ejemplos: el molde del óvalo del emblema fue logrado con una bandeja de plata; de un abanico de Dolores Prats obtuvieron lentejuelas que ornamentaron el sol y Remedios utilizó dos piedras de topacio para los ojos”, precisan.
Los especialistas cuentan que una estrategia que resultó exitosa en la misión sanmartiniana fue dividir a las tropas en siete falanges, divulgando información falsa y no dando a conocer en cuál de ellas se encontraría el general y, con él, la bandera. Ese mismo emblema, más de 200 años después, es conservado en la sede de la Gobernación de la Provincia de Mendoza.
El Salón de Banderas de la Ciudad de Buenos Aires se propuso entonces confeccionar una réplica de la bandera buscando los materiales y tonos más acercados a la original. El símbolo forma a partir de ahora parte del patrimonio del Salón y fue exhibido este miércoles 16 de agosto a las 18 horas en la Avenida Dorrego al 690.
También se presentaron ponencias históricas en torno a curiosidades en la vida del prócer y sobre las banderas restantes que representaron a las tropas. De las charlas participaron los historiadores Miguel Ángel Martínez y Alberto Eduardo Fonticelli, y los expertos en vexilología de banderas sanmartinianas Daniel Silva y Luis Corradi -autor de una obra iconográfica de San Martín exhibida en el Salón-, de la Dirección General de Competencias Comunales y Talleres de la Ciudad. La actividad es abierta a toda la comunidad con inscripción previa en el siguiente enlace.
Taller de Banderas de la Ciudad
El Salón de Banderas recibe habitualmente a grupos de estudiantes de colegios e instituciones y difunde conocimientos históricos sobre las banderas de nuestro país, de la región y del mundo, su historia, formas y modos de confección.
El Taller de Banderas, que funciona de forma paralela y nutre al salón, fue creado en 1946 y se encarga de la realización de los emblemas patrios de la mano de especialistas en vexilología y heráldica, diseño, estampado y costura. En sus instalaciones en el barrio de Chacarita se confeccionan banderas para colegios, plazas y otras instituciones públicas, así como otras destinadas a armados de escenografías en eventos o actos ceremoniales de distintos rangos. Las banderas oficiales se realizan respetando la reglamentación estipulada por Ley, que determina los colores exactos, proporciones, tipos de tela y las características a tener en cuenta en el proceso de confección.
En el taller se elaboran mayoritariamente banderas de Argentina y de la Ciudad de Buenos Aires, aunque también se da respuesta a pedidos para actos de ceremonial y protocolo produciendo, por ejemplo, las insignias de otras provincias o países ante la visita de autoridades extranjeras. En el espacio también se producen los escudos de la Ciudad que identifican a las sedes del gobierno porteño.
