La justicia frenó la demolición de la Escuela Taller ubicada en el Casco Histórico de San Telmo.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, pretendía poder mudar la escuela de donde se encuentra, para ampliar el metrobus del Bajo. Sin embargo, la justicia de la ciudad determinó que la escuela no podrá ser demolida, por lo menos hasta que se encuentre otro inmueble para que pueda seguir funcionando la Escuela Taller del Casco Histórico.
En la actualidad la escuela está ubicada en la esquina de Brasil y Paseo Colón, del Barrio porteño de San Telmo. En cuanto al Gobierno de la Ciudad, desde allí se había tomado la decisión de comenzar la demolición del inmueble al finalizar el ciclo lectivo 2019, con la finalidad de ampliar la avenida por donde funciona el metrobus del bajo, en dirección al barrio de La Boca, e inmediatamente se comenzaría la construcción de un nuevo edificio en Barracas, donde trasladará a la escuela. El inconveniente es que esta obra se paralizó por orden de la justicia.
Romina Tesone, quien es titular del Juzgado Nº 1 en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires, dio lugar a la medida cautelar solicitada por el Observatorio del Derecho a la Ciudad, alumnos y ex alumnos de la escuela. La magistrada reconoció en su resolución, que interrumpir las clases de manera indefinida terminaría siendo violatoria, y mucho más si no se tiene la certeza de cuando comenzarían las clases los alumnos de la escuela, y donde sería ese sitio, que debería estar condicionado pertinentemente.
No obstante, para cuando intervino la fiscalía que ordenó suspender la mudanza -que iba a continuar el domingo-, parte del mobiliario ya había sido trasladado al edificio de Alsina, que el gobierno porteño ofreció como alternativa al que será demolido y donde anteriormente funcionaba la Dirección de Música. De todas formas, la fiscalía estableció una consigna policial en la escuela para garantizar la protección del lugar y lo que aún queda adentro, y cito a las partes a una audiencia para resolver la situación.
Jonatan Baldiviezo explicó que “vamos a presentar una denuncia por incumplimiento de la cautelar, y avanzaremos con una denuncia penal contra los funcionarios que autorizaron esta mudanza, que no tiene autorización de la justicia”. Los voceros del Ministerio sostuvieron que “el amparo habla de que no se puede demoler la sede. No dice que no se puede hacer la mudanza que, por otra parte, es necesaria para que cuando se habiliten las clases se pueda dar continuidad al ciclo lectivo, en un edificio al que se puso en valor y en el que se invirtieron seis millones de pesos para mejorarlo”. “No se está incumpliendo con el amparo”, remarcaron, aunque aclararon que “todavía hay pasos legales por resolver”, explicaron con cautela.
Si bien Baldiviezo señaló que la medida judicial es “para proteger la escuela, no el edificio”. Por eso, añadió, “la jueza ponía la condición de que tenía que dar el visto bueno de la nueva sede. Si fuese por la demolición, a la jueza no le importaría a dónde envían a la escuela taller”. El Gobierno porteño decidió demoler la escuela, que forma parte del plan de manejo y de protección del Casco Histórico, para avanzar con la etapa N° 2 del Metrobus del Bajo. La primera opción que ofreció para reubicar a la comunidad educativa fue un edificio que se iba a construir fuera del Caso Histórico, en el Parque España, en el barrio de Barracas de esta Ciudad.
En tanto el Ministerio de Cultura como el de Desarrollo Urbano, ambos de la ciudad, informaron que la nueva escuela estaría ubicada en el Parque España, que queda en Avenida Caseros 1750. Por su parte, docentes y estudiantes de la escuela se expresaron en contra de llevarlos a esa dirección, ya que ellos esperaban que fuera dentro del Casco Histórico de la ciudad, más cercano al lugar donde están en la actualidad. Luego el Gobierno proporcionó otra posibilidad transitoria, que estaría en la calle Alsina al 900 de CABA.
Aunque la jueza Tesone manifestó que cree que el edificio no está adaptado para que pueda funcionar la escuela taller, de esta manera se complica la función social del mismo.
Tesone, consideró en su fallo, que “frente a la falta de certezas en cuanto a la disponibilidad efectiva de un inmueble en condiciones de albergar a la Escuela Taller del Casco Histórico durante el ciclo 2020 y sin perjuicio de lo que corresponda decidir en caso de aportarse nuevos elementos o de producirse avances en la consecución de un nuevo espacio de estudio, es claro que la demolición del edifico de la avenida Brasil 200 podría importar un perjuicio irreparable“. Y además, advirtió que “el mantenimiento del establecimiento actual se presenta como la única alternativa válida y viable para asegurar las clases”.